Robots móviles en la industria farmacéutica

La tecnología médica requiere un grado especial de eficiencia y precisión en la producción de piezas destinadas a fines médicos. Al mismo tiempo, la industria se enfrenta a exigencias cada vez mayores debido a la competencia del mercado mundial y al aumento de las expectativas de los clientes. Para satisfacer las demandas del mercado, es vital seguir fabricando productos de alta calidad de forma flexible y con un plazo de entrega breve. Para tener éxito, los fabricantes deben utilizar sus recursos de forma eficiente y diseñar procesos operativos fiables que respalden su producción. Los robots móviles autónomos (AMR), como los de Mobile Industrial Robots, se utilizan con frecuencia precisamente para este fin; su tecnología dinámica y flexible permite a las empresas automatizar el transporte interno de materiales de forma sencilla.

Las naves de producción modernas se caracterizan por ser dinámicas y ágiles. Constantemente se realizan transportes internos: los productos semiacabados se llevan del almacén a las líneas de producción, los productos acabados se llevan de las líneas de producción al almacén y los artículos se transportan entre departamentos. Los trabajadores cualificados pasan gran parte del día trasladando piezas de A a B, y normalmente deben interrumpir su trabajo real para hacerlo, lo que provoca paradas innecesarias en las máquinas. Para las empresas de todos los sectores, esto supone una gran pérdida de eficiencia. Los AMR ofrecen un enorme potencial para optimizar la intralogística. Los AMR son flexibles, fáciles de programar y colaborativos, características que se adaptan especialmente bien a los modernos procesos de producción.

Humanos y robots trabajando codo con codo

Mientras que los vehículos de guiado automático (AGV) tradicionales sólo pueden manejarse mediante guías montadas físicamente, como bandas magnéticas o raíles, los AMR como los robots MIR ofrecen una alternativa sencilla y de despliegue rápido. Con sensores y cámaras incorporados y un sofisticado software, los AMR pueden identificar su entorno y tomar la ruta más eficiente hacia su destino, evitando con seguridad obstáculos y personas, lo que permite a los robots trabajar con seguridad junto a seres humanos.

Los robots de MiR son extremadamente flexibles y, en función de los requisitos, pueden equiparse con distintos módulos superiores, como estanterías, cintas transportadoras, brazos robóticos o un gancho que puede remolcar carros de hasta 500 kg. Por lo tanto, los MiR pueden adaptarse a las necesidades de cada empresa, independientemente de si hay que transportar piezas pequeñas, como instrumentos quirúrgicos, o componentes de productos más grandes de dispositivos médicos entre líneas de producción.

Los AMR colaborativos suelen ser muy fáciles de usar y pueden programarse sin necesidad de tener experiencia previa en programación. Conectados mediante Wi-Fi, los empleados de los robots pueden acceder fácilmente a la interfaz del robot de fácil uso desde cualquier ordenador o dispositivo móvil.

Empresas de todos los tamaños, incluso las que antes pensaban que una solución de automatización móvil era demasiado cara o difícil de integrar, lo tienen más fácil para decidirse por la robótica móvil. Porque se eliminan los costes de especialistas especialmente formados y de adaptación de infraestructuras.